Hour months ago, Kyle’s team was struggling. Quality was poor. Morale was low. Productivity was down. Everyone had lost their inspiration, including Kyle. Something needed to change, but no one knew where to begin. Kyle’s manager suggested he sign-up for a Certified Scrum Master® (CSM) course.

Course Size Limited to Sixteen People

If Kyle was going to spend $845 and two days away from work, he wanted to get the most out of the experience. He didn’t want to be just another black square in a Zoom call of fifty people. He wanted a course where he could ask his trainer questions and learn from the other participants.

As he did his research, Kyle discovered The Scrum Academy was the only provider to cap enrollment at sixteen people. Confident that he found a trainer that cared about his learning and success, he signed up for the next course.

An Immersive, Interactive Experience

Within the first five minutes, Kyle noticed this experience was going to be different and better than he had anticipated. One, it had no PowerPoint. Two, the instructor, Carlton, taught the course using a variety of interactive activities, games and exercises. Three, it was fun!

Later, Kyle would tell his Scrum Team, “This was the only training where I couldn’t split my attention between the class and my regular work… and I didn’t want to!”

Real-life Examples, Valuable Insights, Practical Tools You Can Use

As the course started, Carlton said to the group, “We’ve never worked together before. So we need to create a set of working agreements to make visible our unspoken assumptions about how we want to work together.” As the group completed the exercise, Kyle discovered his first insight. His team struggled because they never talked about how they wanted to work together.

Answers to Your Real World Questions

Prior to the course, Kyle had watched some videos about Scrum on YouTube and read a few articles. While he had a basic understanding of the vocabulary and theory, what Kyle’s team struggled with was applying the theory to their work. So Kyle brought his questions to Carlton and Carlton answered them.

Sometimes, Carlton shared an anecdote based on his consulting work. Other times, he used an interesting metaphor to make a deeper connection to an abstract idea. Occasionally, he would refer to Scrum Guide. To every question, Carlton offered a clear, concise answer that blended theory and practice. By the end of the first day, Kyle had two pages of new ideas to try with his team.

Exam Fee Included

At the start of the second day, Kyle began thinking about the CSM exam. He had heard the CSM exam was hard. Sensing people might be anxious about this topic, Carlton kicked off the second day by answering every question about the CSM exam. Kyle summarized the main points in his notes.

1. You have one hour to complete the exam. You can take it at a time and date that is convenient for you.
2. The exam is open book, open Internet. You can use any resources you want while you take the exam, including Carlton’s book.
3. To pass the exam, you need to correctly answer thirty-seven out of fifty questions.
4. If you don’t pass the exam on the first try, you can retake the exam for free.
5. Ninety-eight percent of the students from The Scrum Academy pass the CSM exam on the first try.

As Carlton had predicted, Kyle passed the CSM exam on the first try with a high score, 96%. What Kyle didn’t know at the time was that Carlton had helped write the CSM exam.

Aprende Más de las Mecánicas, Inspírate

Como sabes, las mecánicas de Scrum son fáciles de aprender. Pero lo que Rodrigo y su equipo necesitaban era la capacidad para reflejar en su comportamiento y herramientas para ayudarles a mejorar. Rodrigo se daba cuenta que a su equipo le faltaba el Espíritu de Scrum. El equipo tenía problemas porque solo pasaban de un modo mecánico.

Con esta segunda percepción, Rodrigo regresó al trabajo inspirado y motivado para ayudar al equipo a crecer. El Espíritu de Scrum le dio a Rodrigo un vocabulario que le permitía explicar por qué el equipo necesitaba crecer y cuáles cambios necesitaban hacer. Por hablar sobre valores y principios, en vez de reglas, la gente lo escuchaba con una mente abierta. Al elegir una postura en la que la gente está primero, pudo cambiar su mente.

Haz Mejor Scrum Cuando Usas Todo el Marco

Cuando inició el curso, Rodrigo sabía que su empresa no usaba todo el marco. De hecho, omitían componentes múltiples. Ahora que tenía un entendimiento completo de todo el marco, Rodrigo se dio cuenta que al salir estos componentes se hacía más difícil para que la empresa lograse sus objetivos.

Por ejemplo, el equipo de Rodrigo no tenía un Objetivo de Sprint. El Objetivo de Sprint es la meta singular para el Equipo Scrum. Es el hilo común que une todas las tareas en un Sprint y da significado al trabajo. Sin un Objetivo de Sprint, los Desarrolladores no eran un equipo; solo eran personas haciendo tareas al azar. Esta fue la tercera percepción de Rodrigo e iba a utilizarla para crear cambio.

Experimentos Pequeños para Probar por tu Propia Cuenta

La semana siguiente, Rodrigo animó al equipo a probar un experimento - se comprometieron a identificar un Objetivo de Sprint por los tres Sprints siguientes. Y los resultados fueron sorprendentes.

Este pequeño cambio le dio al equipo un motivo para colaborar. En vez de una reunión aburrida sobre el asignamiento de tareas, la Planificación de Sprint se hizo un debate colaborativo sobre cómo el equipo iba a resolver un problema. En vez de una serie de informes monótonos que podrían haber hecho por correo electrónico, el Scrum Diario se hizo en un check-in rápido sobre el progreso colectivo del equipo hacia su Objetivo de Sprint común. En vez de un Product Backlog desordenado, el Product Owner organizó el Product Backlog por temas y metas deseados por el negocio.

Llamar la Atención por los Motivos Correctos

Mientras el experimento pasaba, era claro que algo era diferente. Las personas empezaron a trabajar como un equipo. Las partes interesadas podían ver progreso según las metas definidas por ellas. La calidad subía mientras que los bugs bajaban. Sprint-por-Sprint, el equipo se hacía más productivo y empezaba a ganar. Esto aumentó la moral del equipo y la satisfacción de las partes interesadas.

Una tarde, un alto ejecutivo le preguntó qué había motivado el cambio dentro del equipo. Rodrigo le contestó, “Mi clase de CSM me convenció que para lograr mejores resultados, tenemos que actuar diferentemente. El equipo estuvo de acuerdo, así que tomamos la decisión para probar un experimento.”

Carlton Tiene Veinticinco Años de Experiencia

Cuando alguien le pregunta a Rodrigo sobre Carlton, él les decía que Carlton es extremadamente entendido, agradable, bondadoso y se enfoca en soluciones prácticas. En adicción, Rodrigo subraya la experiencia amplia de Carlton trabajando en la industria de software como programador, Scrum Master, jefe de producto, consultor y ejecutivo. Esta variedad de experiencias, en niveles múltiples de una organización, destaca a Carlton.

Once Beneficios Adicionales Incluidos en Tu Inscripción

1. Todas las tarifas del examen, certificación y membresía se incluyen en el precio.
2. Una membresía gratis de dos años con el Scrum Alliance.
3. Apoyo ilimitado después del curso hasta que apruebes el examen.
4. Una copia digital de tu cuaderno de ejercicios y cualquier recursos del curso.
5. Examen práctico para chequear tu conocimiento antes de tomar el examen de CSM.
6. Una copia gratis del libro de Carlton, Catorce Observaciones para la Práctica de un Buen Scrum, una guía excelente para ayudarte a preparar para el examen de CSM.
7. Una lista comprehensiva de libros recomendados para acelerar tu aprendizaje continuo después de tu curso.
8. Apoyo y consejo de por vida - simplemente debes llamar o enviar un correo electrónico si necesitas ayuda adicional.
9. Cancelar sin problemas y reprogramar de manera flexible.
10. Dieciséis PDU (para PMP o PMI-ACP).
11. Dieciséis SEU (para Scrum Alliance).